viernes, 14 de junio de 2013

XI Domingo del Tiempo Ordinario



El Domingo del Amor, del Perdón

Simón el fariseo no fue capaz de apreciar el gesto de aquella mujer llena de amor por Jesús y de arrepentimiento por sus pecados perdonados. Y así Simón perdió la oportunidad de hacer suya una enseñanza de enorme calado. El amor –que es la substancia de Dios—nos mueve a construir lo mejor de nuestras vidas. Hemos de tener cuidado con la soberbia o con la indiferencia que son actitudes que tapan el amor, la gratitud, el más sincero arrepentimiento.