Saludo del Rector

Como bien sabéis la Virgen María se nos presenta como madre
nuestra en distintas advocaciones, pero una
única madre de nuestro Señor y redentor, quien por su disponibilidad a la
voluntad de Dios nuestro Padre trae la salvación a los hombres, y nos invita a
seguirle, desde nuestra propia realidad.
San Lucas, el evangelista de la misericordia, nos presenta a
la Virgen María, y a través del cántico de Zacarías anuncia la Salvación: “por la entrañable misericordia de nuestro Dios,
nos visitará el Sol que nace de lo alto,
para iluminar a los que viven en tinieblas y sombra de muerte, para
guiar nuestros pasos por el camino de la paz” (Lc. 1, 78-79). La Divina
Aurora, “la nueva mañana”, “la nueva Eva” es quien nos trae el sol que nace de
lo alto, que es Cristo, quien nos invita a seguirle con todas nuestras fuerzas,
sin miedos ni complejos, para quitarnos las tinieblas de un mundo consumista,
lleno de tantos apegos que de diversas maneras esclavizan bajo una aparente “libertad”, que engaña y
empobrece al ser humano.

Os recuerdo la invitación para el sábado 20 de agosto, en
que tendremos vuestra fiesta y a su vez celebraremos la última misa jubilar
dedicada a los Jóvenes de Corbera, os espero a todos, para que juntos a los
pies de la Virgen le demos gracias, y así ganemos las indulgencias de este Año
Jubilar Mariano.